ROMPIENDO LAS CADENAS DE LA VIOLENCIA

Existen muchas maneras de alzar nuestras voces para expresar el rechazo hacía la violencia que diariamente es ejercida sobre las mujeres, y para hacerlo el arte y los actos simbólicos se constituyen en una excelente herramienta para transmitir nuestro mensaje de NO MÁS.

Con motivo del día internacional de la NO violencia contra las mujeres, 4 asociadas y los dos profesionales sociales de la Asociación mujeres de Corazón presentaron un PERFORMANCE, llamado "Rompiendo las cadenas de la violencia" donde todas vestidas de negro y con mascaras, llevando en sus espaldas: el miedo, la humillación, el maltrato y el machismo se enfrentaban a todos estos problemas y finalmente rompían sus cadenas, se quitaban las mascaras y alzaban sus voces de rechazo.

Este acto despertó muchos sentimientos en las personas asistentes, muchas de ellas con lagrimas en sus ojos se sintiero

n identificadas con las escenas de violencia y maltrato representadas. 

Para nuestras mujeres artistas participar en esta actividad fue todo un reto, todas ellas madres de familia de diferentes edades, con historias de vida impactantes y con un fuerte liderazgo en su comunidad, que asumieron el reto de transmitir con sus cuerpos un mensaje de rechazo profundo contra cualquier tipo de violencia. 

Lamentablemente, la violencia contra las mujeres es una de las vulneraciones más cotidianas y repetidas en nuestro tiempo, a pesar de que supone una violación de la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Su mantenimiento en el tiempo es el resultado de la discriminación que padece la mujer a nivel tanto social, político, como económico, así como por la persistencia de las desigualdades por razón de sexo. 

Es por ello, que el reconocimiento de los derechos de las mujeres, es también el reconocimiento a la valentía y la perseverancia que ha tenido sus batallas. La eliminación de la  violencia contra la mujer es uno de los puntos más relevantes de la lucha de las mujeres por sus derechos  y no puede ser justificada desde ninguna trinchera cultural que pretenda mostrar la desigualdad y la discriminación como factores culturales. 

El respeto a los Derechos de las mujeres es de carácter universal y aunque debe tener en cuenta las diferencias culturales que existen en el mundo, estas diferencias siempre deben estar en pro de las mujeres y no en contra de sus derechos.